Un amor sin una pluma
una pluma de quetzal
como avecilla absurda
que ya no quiere trinar.
Un amor que fue una siembra
gran cosecha de nopal
se nos ha vuelto un desierto
como arenas del jordán
Un amor que era un agüita
del más fresco manantial
ya no calma los ardores
no hay ardor, sino penar
Pajarillo siembra y agua
que abrevaba nuestro edén
se perdió en la mañanita
se extravió el amor también
Perdió el ave su consuelo
la siembra su manantial
nuestro amor no fue de acero
ni una pluma de quetzal.